Permanecerán en mi amor
Si guardan mis mandamientos, permanecerán en mi amor, como yo he guardado los mandamientos de mi Padre, y permanezco en su amor.

Reflexión: Juan 15,9-11
¿Qué podemos decir? La vida no tendrá ningún sentido si no alcanzamos la Vida Eterna, porque para eso fuimos creados. Para eso nos hizo Dios. Cada cosa, cada objeto, cada sujeto en el Universo ha sido creado por Dios con un propósito. Nada es inútil; nada sobra, ni nada falta. La obra de Dios es perfecta. No podría ser otro modo, procediendo de su Poder y Sabiduría Infinitas.
Nosotros fuimos creados por Dios para alcanzar la Vida Eterna. Esto es lo único que da sentido a nuestras vidas; este es nuestro propósito. Nuestras almas no descansarán hasta conseguirlo. ¿Cómo asegurarnos de lograrlo? ¡Amando! Dando muchos frutos. Los dulces frutos del amor, que exigen entrega, unión, paz, perseverancia y fe. Todo esto está a nuestro alcance por Gracia de Dios, quien nos creó únicos e irrepetibles. ¡Esa es Su Voluntad! ¡Él quiere eso para nosotros!
¿Por qué Dios pondría a nuestro alcance la capacidad de obtener Sus promesas? Porque nos ha creado por amor y para el amor. Nada quiere más el Señor que nuestro Bien. Y lo quiere, sin ninguna condición. Por eso lo puso en nuestras manos aun antes que existiéramos. Es decir que en ello no hay mérito alguno nuestro. No hemos hecho nada para merecerlo. No es un premio o recompensa por nuestro esfuerzo. Es la Voluntad Misericordiosa de Dios Padre Creador. Descubrirlo solo puede movernos a la gratitud y alabanza.
Seguir leyendo Juan 15,9-11 – permanecerán en mi amor
(666) vistas